viernes, 7 de noviembre de 2008


Me sentí como una niña sentada en su regazo de salitre,
con los ojos abiertos al horizonte
devorando la vida de un bocado y tragando sin disfrutarla.
Luego me di cuenta de mi alrededor,
del verdor grisáceo de los árboles,
del azul mulato, bronceado constantemente por el sol;
amarillo enérgico que rechazo cuando me besa los ojos.
más tarde me senté al pie del abismo
y me quede estática como piedra,
desempolvando pensamientos recién adquiridos en la tienda de la esquina.
pero antes de todo aquello,
antes de las sonrisas sin razón y los ojos achinados,
antes de hacer malabares con dos mundos
y antes de concretar una conclusión,
sigo siendo pequeña.

Leidy González

1 comentario:

Anónimo dijo...

Helloooooooousssss!!!!!

Aparte de que eres super genial, simplemente por ser quien eres, quiero decirte que tu blog esta parecido a ti, porque tu eres aun mejor.

Eres de las pocas personas a las que admiro. Creo que te coji cari☺o muy rapido, pero esas son cosas que pasan.

Un besote grandote mi AGARRE querido.

Ya sabes quien soy.

Te Kierooooo!!!!!

Lo dije por que lo sentir y ya!