miércoles, 4 de julio de 2007

Detente.

Mira hacia ambos lados, fijate bien.
El aire empieza a faltar,
la noche no parece suficiente
y no logro concevir el sueño.

Si tan sólo tuviera fuerza,
algo venidero de mis propias manos,
que nazca desde mis entrañas y salga por mi boca:
una palabra, un aliento, un "detente".
Detente, lo susurro.
Si tan sólo no tuviera miedo,
si no me aferrara a una supuesta seguridad,
si no dependiera del futuro,
entonces ahí pudiera gritar detente.
¡Detente!
como lo dijo su primogenito en sus días de confusión
y tomó él su propia descición.
Detente, y miralo ahora, encaró sus temores y está feliz,
detente y observa denuevo.

Tengo una espina clavada en el alma,
y cuando me muevo: me molesta,
cuando pienso por mí: me molesta,
y cuando me quedo sentada: me molesta;
¿y aquí queda todo?
Sólo a acatar ordenes,
y ahora molesta.

Leidy González
4/7/07

1 comentario:

[K] dijo...

"Tengo una espina clavada en el alma,
y cuando me muevo: me molesta,
cuando pienso por mí: me molesta,
y cuando me quedo sentada: me molesta;
¿y aquí queda todo?
Sólo a acatar ordenes,
y ahora molesta."



Get free... Remember, a pesar de tener todos los dientes y boca rotos.

La sonrisa de lograr lo que consideas que necesitas para ser feliz es la mejor que se puede dar en la vida completita de una persona.